SER HOMBRE O MUJER MEDICINA
Ser Hombre o Mujer Medicina comienza en re conocer (volver a conocer) que detrás de toda forma de vida hay una fuerza invisible que la sostiene. A esa fuerza la llamamos Espíritu. Nada de todo lo que ocurra en tu vida, afecta de una mala manera a tu Espíritu. Nada. En el Camino de los Hijos de la Tierra, se reconoce Hombre, o Mujer Medicina, a la persona que, luego de muchos años de servicio a la familia, ha logrado integrar la Medicina de su Espíritu consigo mismo y con los demás. Ser Medicina es brindar servicio, subordinándome al Amor para unir, y unirme, al Gran Espíritu. El desafío es en cada momento y, para cada uno, comienza conmigo mismo. Darme la Medicina que soy. Ser Hombre Medicina, no es lo mismo que ser un yerbero o un curandero. Un yerbero tiene su foco centrado en las plantas y su poder de cura. Un curandero tiene su foco centrado en las dolencias físicas, y utilizará sus conocimientos para recuperar la vitalidad y la armonía del paciente. Un Hombre Medici